Una nueva producción de La bohème, de Giacomo Puccini, con Paolo Carignani, en la dirección musical, y Richard Jones, en la de escena, llega al Teatro Real en coproducción con la Royal Opera House de Londres y la Lyric Opera de Chicago. El frío diciembre de Madrid nos transportará al invierno parisino, teñido de melancolía, para acompañar el amor truncado de Rodolfo y Mimí.
Puccini construye una historia protagonizada por personajes juveniles, cargados de inocencia y esperanza, cuyos sueños se truncan en medio de la miseria y cuyas vidas siguen conmoviendo hoy en día. La belleza musical, la eficacia dramática, los motivos orquestales y la narración sentimental propia del melodrama italiano, hacen de La bohème una de las óperas más queridas.
Muy pocas obras en la historia de la ópera han logrado transmitir la fragilidad de la felicidad como La bohème. El arrollador amor de Mimì y Rodolfo lucha por sobrevivir, sin lograrlo, en un contexto de miseria, frío y enfermedad, y con su final trágico ilustra la descarnada realidad típica del verismo italiano. Giaccomo Puccini se valió, para poner música a su historia, de un refinado lenguaje armónico y de unas melodías de sobrecogedora belleza, a través de las cuales dio vida al grupo de jóvenes artistas del París del siglo XIX que sueña con un golpe de suerte con el que alcanzar la gloria.
La pureza de Mimì, perfecta encarnación de la mujer bondadosa e inocente con la que se ensañará el destino, contribuye a atenuar momentáneamente la crudeza de unas vidas sin esperanza. El estreno se llevó a cabo bajo la batuta de un joven Arturo Toscanini y, a pesar de la fría acogida inicial por parte de público y crítica, La bohème no tardaría en convertirse en uno de los pilares ineludibles del repertorio italiano romántico.