Una humilde compañía de ópera itinerante se prepara para cantar “L’Afrcaine” de Meyerbeer. El empresario Querubini tiene como lema ahorrar al máximo y no pagar a nadie. Uno de sus recursos es emplear a su familia: la Antonelli, la soprano principal de la compañía, es su mujer. Amina, la mezzo, su hija. Habiendo pasado por Aragón en su gira, han recogido a un tenor, joven de buena familia, que también ha aceptado cantar gratis. Querubini sospecha que José (ahora apodado “Giuseppini”, nombre más apropiado para una compañía de ópera) en realidad está enamorado de su mujer, pero siendo un tenor gratis trata de sobrellevar la situación sin que pase a mayores. Amina confiesa que está enamorada del tenor, y Giuseppini ve así la oportunidad de mantener al tenor en la familia (cantando gratis) y su honra intacta al mismo tiempo, con lo cual le fuerza el compromiso a Giuseppini. En medio de la representación de “L’Africaine” la representación es interrumpida por el mismo Querubini, cuando el tenor aprovecha la trama para abrazar impudicamente a la Antonelli. La policía interviene para evitar el escándalo y la función se retoma, pero finalmente todo se viene abajo con una segunda interrupción: la madre del tenor, que lo ha buscado por toda España.