Jacques Offenbach fue un compositor francés de nacionalidad alemana, violoncelista y empresario del período romántico. Es recordado por sus casi 100 operetas compuestas entre 1850 y 1870 y su opera incompleta Les Comtes d’Hofmann. Fue una poderosa influencia en los compositores de opereta subsiguientes, particularmente Johann Strauss, Jr. Y Arthur Sullivan. Sus trabajos más populares recibieron reposiciones regulares durante el siglo XX y muchas de sus operetas continúan siendo representadas en el siglo XXI. Les Comtes d’Hoffmann es parte del repertorio estándar de ópera.

Nació en Colonia, hijo de un cantante de sinagoga, Offenbach mostró talento musical desde pequeño. A la edad de 14 fue aceptado como estudiante en el Conservatorio de París pero encontró el estudio académico poco satisfactorio y abandonó después de un año. Desde 1835 a 1855 se ganó la vida como violoncelista, recibiendo fama internacional, y como director musical. Su ambición, sin embargo, era componer piezas cómicas para el teatro musical. La administración de la compañía de la Opéra-Comique de Paris no estaba interesada en llevar su trabajo a escena, por lo que en 1855 rentó un pequeño teatro en los Champs-Élysées. Allí presentó una serie de sus propios trabajos de pequeña escala, muchos de los cuales se volvieron populares.

En 1858, Offenbach produjo su primer opereta de gran formato, Orphée aux enfers, que fue recibida excepcionalmente bien y que se ha mantenido entre sus trabajos más representados. Durante la década de 1860, produjo al menos 18 operetas de gran formato, como así más piezas de un acto. Su trabajo de este período incluye La Belle Hélène (1864), La Vie Parisienne (1866), La Grande-Duchesse de Gérolstein (1867) y La Périchole (1868). El humor escabroso (a menudo sobre intrigas sexuales) y las gentiles aristas satíricas de esas piezas, junto con la facilidad Melódica d Offenbach, las hicieron internacionalmente conocidas, y versiones traducidas fueron éxito en Vienna, Londres y otros lugares de Europa.

Offenbach fue asociado con el Segundo Imperio Francés de Napoleón III; el emperador y su corte eran genialmente satirizados en muchas de sus operetas. Napoleón III en persona le otorgó la ciudadanía francsa y la Légion d’Honneur. Con el estallido de la guerra Franco-Prusiana en 1870, Offenbach perdió popularidad por sus conexiones imperiales y su ascendencia alemana. Mantuvo su éxito en Viena y Londres, sin embagro. Volvió a establecerse en París durante la década de 1870, con reposiciones de algunos de sus primeros favoritos y series de trabajos nuevos, y emprendió un popular tour por los Estados Unidos. En su último año de vida se esforzó por terminar Les Comtes d’Hoffmann, pero murió antes de estrenar la ópera, que entró en el repertorio estándar con versiones completas o editadas otros músicos.

Offenbach murió en París. Su causa de muerte fue certificada como falla cardíaca traída por un caso agudo de gota.