Gluck fue el primero de nueve hijos. En 1717 la familia se trasladó a Bohemia: primero a Reichenberg, después a Kreibitz en 1722 y finalmente a Eisenberg en 1727, donde su padre era un ingeniero forestal al servicio del príncipe Philipp Hyazinth von Lobkowitz.

En 1737 llega a Milán, donde había aceptado un trabajo en una orquesta y allí aprendió el funcionamiento y la naturaleza de la ópera. Estudió composición con Giovanni Battista Sammartini y pronto cosecha éxitos en los escenarios con óperas italianas. En su primera aparición verificada como compositor, ya a los 27 años, fue con Artaserse, estrenada en diciembre de 1741 en Milán. 

Los siguientes años serían una etapa muy productiva como compositor: Demetrio (Venecia 2 de mayo de 1742), Demofoonte (Milán 6 de enero 1743), Il Tigrane (Crema 9 de septiembre de 1743), La Sofonisba (Milán, 18 de de enero de 1744), Ipermestra (Venecia, 21 de Noviembre, 1744), Poro (Venecia 26 de Diciembre de 1744), Ippolito (Milán, 31 de Enero, 1745), todas ellas operas serias bastante convencionales, varias con libretos de Metastasio. 

Gluck realizó luego largos viajes a través de Europa junto con Georg Christian Lobkowitz que estaba en Londres. Finalmente se estableció en Viena y más tarde se convertiría en Kapellmeister. Para una festival escribió Le cinesi (24 septiembre 1754) y para el cumpleaños del archiduque Leopoldo escribió La danza (5 de mayo 1755). Después de la presentación de su Antígono (9 febrero 1756) en Roma Gluck fue nombrado por el Papa Benedicto XIV Caballero de la Espuela de Oro. Desde entonces utiliza Gluck el título "Ritter von Gluck" o "caballero de Gluck".

En los años siguientes, Gluck se apartó totalmente de la ópera seria italiana y en su lugar se dedicó a editar trabajos de Opéra Comique francesa. La primera de estas obras fue aparentemente Tircis et Doristée (1756). En 1761, se realizaron funciones de gran éxito del ballet Don Juan con coreografía del bailarín y coreógrafo Gasparo Angiolini. Mozart debe hacer referencia en su ópera Le nozze di Figaro (1786) al Fandango tal como lo había oído en Gluck en este ballet.

Con el tiempo Gluck se planteó preocupaciones fundamentales sobre el contenido y la forma de la ópera. Ambas formas principales de ópera le parecían alienadas de lo que deberían ser. Parecían poco natural, y mientras la ópera seria dirigía el canto hacia efectos superficiales, con contenido poco interesante y fosilizado, la ópera bufa había perdido su frescura original desde hacía ya algún tiempo, consumida por los mismos chistes en que los mismos personajes eran presentados en versiones caricaturescas. También, en la ópera seria el cantante era visto como autoridad absoluta en el escenario y la música como un vehículo para su arte supremo: a tal punto las melodías eran modificadas y ornamentadas que el oyente no podía siquiera imaginar la melodía original. Gluck quería llevar la ópera a su origen, en una ópera debería estar el drama humano, la pasión, la tragedia y los sentimientos humanos arquetípicos en primer plano y las palabras y la música debían ser equivalentes, si no la música debería incluso estar subordinada o complementar la situación dramática.

La marca registrada de las siguientes obras de Gluck, en la ópera cómica francesa, son las arias cortas, al estilo de canciones, de construcción simple. Aquí nace el germen de la revolución de Gluck. 

Bajo el patrocinio de Maria Antonieta, su antigua alumna de canto, casada conel delfín francés Louis XVI, realiza un acuerdo por seis óperas con la Dirección Opera de París. Se inició con Ifigenia en Auride (19 de abril 1774), con el estreno inflamado una disputa inesperada, casi una guerra que recuerda a los parisinos querella de los bufones veinte años anteriores.

El 2 de agosto 1774 su versión francesa Orphée et Euridice se presentó por primera vez - mejor aceptada por el público parisino. En el mismo año regresó a Viena, donde fue nombrado Compositor Real e Imperial. En los años siguientes, el ahora famoso en toda Europa compositor, se mantiene viajando entre Viena y París. Para París, escribie Armida (23 septiembre 1777), Iphigénie en Tauride (18 de mayo, 1779) y finalmente Écho et Narcisse (24 septiembre 1779). Durante los ensayos de esta última,  Gluck sufrió el 30 de julio 1779 un primer accidente cerebro-vascular. Después de esta ópera, vuelve a Viena.

El 15 de Noviembre de 1787, Glück sufre un segundo ACV, y muere algunas horas después.