Amadeo Vives

Nació en Collbató, un pequeño pueblo ubicado en la falda de la montaña de Montserrat que en aquel entonces apenas llegaba a los 800 habitantes. Hijo de Rafael Vives Solá y Josefa Roig Deu, una familia humilde de panaderos, fue bautizado en la iglesia de San Cornelio con los nombres de Amadeo José Juan (Amadeu Josep Joan). A los cinco años comenzó a acompañar a su hermano Camilo, diez años mayor, al vecino pueblo de Esparraguera para recibir clases de música del señor Flaquer, organista de la iglesia parroquial de la localidad. En 1877 sufrió un accidente que le dañó el brazo y la pierna izquierdos, que le quedarían atrofiados para siempre.
Estudió armonía y composición con José Rivera Miró, organista de la capilla de música de la parroquia de Santa Ana de Barcelona, y más tarde actuó como maestro de capilla en un asilo de Málaga y en el convento de Loreto enBarcelona. Junto con Lluís Millet fundó el Orfeón Catalán en 1891, para el que compuso numerosas canciones originales, como L'emigrant o La Balanguera, y transcripciones de música popular. Su vida transcurrió entre Barcelona y Madrid, gozando de gran fama en ambas ciudades. También cultivó el periodismo y fue colaborador de La Tribuna; luego reunió esos artículos en el volumen ...Sofía (ensayos literarios) publicado en 1923 y reimpreso modernamente (Madrid: Espasa-Calpe, 1973).
Fue autor de canciones y de más de un centenar de obras escénicas entre óperas, operetas y zarzuelas. Destacó especialmente por estas últimas, en particular por Maruxa, Bohemios y Doña Francisquita, consideradas entre las obras cumbre del género. Otras de sus obras destacadas son Don Lucas del Cigarral, La Balada de la Luz, Doloretes, El húsar de la guardia, La Gatita Blanca, El Talismán Prodigioso, Juegos malabrares, Balada de Carnaval y La Villana. Persona de gran cultura, también dejó una estimable obra literaria, que comprende diversos ensayos sobre estética musical; un libro autobiográfico, Sofía (1923); y una exitosa comedia teatral, Jo no sabia que el món era així (Yo no sabía que el mundo era así), estrenada en Barcelona en1929 y que recibió el título de Rosalía cuando en 1930 fue estrenada en Santander su versión en español.
El 21 de Septiembre de 2014, sus restos mortales han sido devueltos a Collbató, bajo una gran expectación por parte de habitantes y amigos.